Objetivo: Determinar si 12 sesiones de entrenamiento de resistencia de los miembros inferiores a una altura simulada (2.500 m) son suficientes para provocar una mejora en la recuperación del índice de frecuencia cardíaca en los primeros 3 min de recuperación tras una sesión de saltos en contramovimiento.
Material y métodos: Doce sujetos jóvenes físicamente activos se dividieron en dos grupos equilibrados para entrenar en hipoxia (HYP) y normoxia (NOR). Los sujetos fueron asignados a cada grupo en base a los resultados en una prueba previa de salto en contramovimiento de 60 s (CMJ60). Ambos grupos realizaron durante 4 semanas un entrenamiento idéntico de fuerza (volumen, intensidad, carácter y condiciones de esfuerzo) en las extremidades inferiores (squat, half-squat y saltos).
Resultados: Ambos grupos mejoraron en todos los casos. Se analizó la evolución temporal de la frecuencia cardiaca durante la prueba CMJ60 y el posterior período de recuperación de 3 min. El grupo HYP (n = 5) refleja una mejoría del índice de recuperación de la frecuencia cardiaca en comparación con el grupo NOR (prueba t de Student) después de 2 (p = 0,03) y 3 (p = 0,05) minutos de finalizar el test de saltos.
Conclusiones: Concluimos que un protocolo de entrenamiento de fuerza-resistencia (12 sesiones en 4 semanas) de las extremidades inferiores en altitud simulada podría mejorar el índice de recuperación de la frecuencia cardiaca en comparación con el mismo entrenamiento realizado a nivel del mar.