La muerte súbita en el deporte está causada en la mayoría de ocasiones por enfermedades cardiacas. El objetivo del cribado pre-participativo es poder identificar a los individuos que requieran un tratamiento específico para continuar el deporte o el cese de la práctica deportiva. La evidencia científica actual se basa en recomendaciones de expertos que en algunos casos son controvertidas y en ocasiones poco prácticas. Esta revisión tiene como objetivo dar un enfoque actualizado y pragmático de las recomendaciones en los deportistas con cardiopatía.
In most cases, sudden death in sports is caused by heart disease. The aim of pre-participation screening is to identify individuals who require specific treatment to continue the sport or stop practicing it. Current scientific evidence is based on expert recommendations that in some cases are controversial and sometimes impractical. This review aims to present an updated and pragmatic approach to the recommendations in athletes with heart disease.
Los beneficios cardiovasculares que aporta el ejercicio moderado están bien establecidos1, aunque el ejercicio puede provocar ocasionalmente la muerte súbita cardiaca en deportistas con enfermedad cardiaca de base2. En este contexto, la descalificación del deporte de los individuos afectados ha demostrado ser una estrategia útil en el único estudio realizado con este objetivo3.
La reciente actualización de la conferencia de Bethesda4 aporta recomendaciones de nivel C (opinión de expertos) para los deportistas competitivos, pero en algunos puntos difiere de las recomendaciones europeas en miocardiopatías y valvulopatías5, arritmias y canalopatías6, 7, y cardiopatías congénitas8. El grupo de cardiología deportiva de la Sociedad Europea de Cardiología9 incluyó recomendaciones para los deportistas no competitivos, es decir, los que practican deporte recreativo y actividad física en general, que en recomendaciones previas no habían sido incorporados; también en esta publicación se agrega un cambio de utilidad práctica en el momento de dar una recomendación médica para la realización de deportes, cambiando el componente dinámico de la clasificación de Mitchell10 (Tabla 1) por el porcentaje de frecuencia cardiaca (FC) máxima obtenida en una prueba de esfuerzo con análisis de gases respirados; o bien con el equivalente en la escala de Borg de esfuerzo percibido (Tabla 2).
DefinicionesEl tipo de actividad física es de especial importancia para la recomendación en la intensidad de ejercicio A continuación se definen aquellas en las que existe consenso internacional en su nomenclatura.
Actividad físicaMovimiento corporal activo por contracción muscular que aumenta la tasa metabólica por encima del nivel de reposo. La actividad moderada se define como una actividad entre 3-6 MET y vigoroso cuando es > 6 MET8.
Ejercicio regularEs la actividad física planeada, estructurada y repetitiva que se realiza por más de 30 min al menos 3 días por semana durante los últimos 3 meses con moderada intensidad; tiene como objetivo mantener o mejorar la forma física11.
Deporte recreativoActividades físicas sin la necesidad de jugar o con una intensidad mayor que la deseada por el participante. La actividad o el deporte pueden ser organizados o informales, y pueden ser espontáneos o estructurados para la competencia entre los participantes o equipos. Sin embargo, cualquier participante puede dejar de participar o puede disminuir la intensidad de su participación en cualquier momento, sin presión de sí mismo o de otros para continuar8.
Deporte competitivoDeporte organizado, competitivo y en el que las actividades físicas se rigen por reglas para mantener un juego limpio. Existe presión para entrenar o jugar, y son a una intensidad alta, independientemente de si esa intensidad es deseada o recomendada para el participante. El origen de esa presión puede ser del propio deportista, de compañeros, de entrenadores o de espectadores8.
EliteDeportista competitivo que entrena > 6 h a la semana y que regularmente compite a nivel regional, nacional o internacional12.
RecomendacionesEl objetivo de esta revisión es resumir las principales anomalías y cardiopatías que se pueden encontrar en deportistas y pretende dar una recomendación y pauta general de la actitud a seguir en el caso de la recomendación de la aptitud cardiológica para la práctica deportiva tomando los principales grupos de enfermedades cardiacas, es decir: miocardiopatías (Tabla 3), valvulopatías y aorta (Tabla 4), arritmias y canalopatías (Tabla 5), y cardiopatías congénitas (Tabla 6). Para cada una de las alteraciones se otorga una recomendación de la intensidad de ejercicio recomendado según el tipo de deporte recreativo o competitivo. Con el objetivo de simplificar esta indicaciones se otorgó un color rojo cuando el deporte competitivo está contraindicado y el deporte recreativo está permitido si es de un bajo componente estático (Mitchell I) y se realiza a una intensidad menor al 60% FC máxima o menor al 5 de la escala de Borg, y un color amarillo cuando el deporte competitivo está permitido solo en los deportes de la clasificación de Mitchell IA (p. ej., golf, bowling) y el deporte recreativo está permitido si es de un bajo-moderado componente estático (Mitchell I y II) y se realiza a una intensidad menor al 75% FC máxima o menor al 6 de la escala de Borg. Sin embargo, hay que destacar que la decisión siempre debe ser individualizada y personalizada según la severidad de la cardiopatía, las comorbilidades del sujeto, la modalidad y disciplina deportiva que se practique y, de forma importante, también el entorno personal del sujeto.
Volver a jugarLa Tabla 7 muestra las recomendaciones sobre cuándo es posible la vuelta al deporte competitivo («volver a jugar») luego de las diferentes intervenciones terapéuticas cardiológicas que se hayan realizado. Es recomendado, si el procedimiento no presentó complicaciones, el inicio del entrenamiento progresivo y pautado en los días previos a la competencia.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.
Recibido el 18 de septiembre de 2016;
aceptado el 27 de septiembre de 2016
Disponible en Internet el 13 de diciembre de 2016
* Autor para correspondencia.
Correo electrónico: grazioli@clinic.ub.es (G. Grazioli).